¿Ser amado o ser temido?

"Ser amado o ser temido" esta reflexión lanzaba Nicolás Maquiavelo en su obra más famosa llamada "El príncipe", como siempre cuando de historia se trata, sobre todo si esta es antigua, hay que retroceder hasta esa época para tener una perspectiva objetiva, rondaba el año 1532, Italia, tierra natal de Maquiavelo y por aquellos entonces divida en conflictos internos sangrientos, además, era asediada por españoles, franceses, pueblos de Europa central y por si fuera poco por su mismísima santidad el Papa, situados en este contexto, la cosa empieza a tener más sentido, Maquiavelo no quería decir más que: Si para controlar un estado, es necesario mano dura para que las distintas regiones que componen el estado enfrentadas entre sí, se unan para rechazar al enemigo extranjero, ¿que es mejor para el gobernante?, ¿ser amado o ser temido?, él mismo contesto a esta pregunta en la misma obra: "Lo mejor es una mezcla de las dos, pero como es altamente dificil conseguirlo, es preferible ser temido, para de esta forma someter a las regiones al mandato del estado y organizar este para repeler al enemigo extranjero".

Fuera de este contexto u otros parecidos, esta reflexión del astuto Maquiavelo, es una auténtica barbaridad, por eso, yo me pregunto: ¿por qué las personas a las que no amas ni amarías nunca se siguen molestando en agradar?, ¿en aparentar ser cosas que no son: amables, educados/as, sinceros/as, sensibles?, si además cuando bajan de su quimérica nube, compuesta por hipócritas y simuladas apariencias que ya incluso ellos/as creen ciertas, comprenden que nadie, ni los niños (estos menos, tienen una mirada más escrutiñadora) les creen, que todos/as vemos sus plumeros arrastrados por el suelo hasta la saciedad, es entonces cuando deciden imponerse a través del miedo, mejor muerto que terrorista, si te conviertes en terrorista, jamás volverás a oír un juicio justo sobre ti, jamás volverás a sentir muestras de afecto sinceras, jamás volverás a saber a ciencia cierta lo que los demás piensan de la vida, jamás tu conciencia volverá a estar tranquila, jamás volverás a ocupar el lugar que desde niño tu mismo elegiste, jamás volverás a ser aquel que desde niño fuiste ante tus mayores y los que no eran tuyos, “mejor muerto antes que terrorista “.